The House of Mystery
Planeta DeAgostini saca al mercado una de esas colecciones clásicas, a las que nos tiene acostumbrados, e imprescindible tener en nuestras estanterías si realmente deseamos definirnos como amantes del cómic.
La serie no viene numerada, sino que cada volumen está dedicado a un autor en concreto. Nos referimos a The House of Mystery, la mítica revista publicada por DC a finales de los sesenta dedicada al terror, y donde se vio nacer a multitud de autores hoy día de sobra conocidos, y la que sirvió también como primera parada a esos nombres tan ilustres procedentes de Filipinas, generación de dibujantes que marcaron una época durante la década de los ochenta.
Este primer número esta dedicado a Bernie Wrightson, autor que no hace falta siquiera presentar, su calidad y popularidad habla por si mismo. En las historias que recopila este volumen Wrightson viene acompañado de una serie de guionistas que daban sus primeros pasos en el mundo del cómic, Marv Wolfman, Joe Orlando o Dennis O’Neil entre otros igual de conocidos.
No solo EC y Warren tenían el monopolio del terror, muchas otras editoriales también publicaban cómic de género y de calidad similar, una de ellas era DC que ostentaba dos colecciónes The House of Mystery y The House of Secrets.
Caín, el conserje de La casa del misterio, su mascota la gárgola Gregory, y Abel, el hermano del primero, iban presentándonos las historias de terror archivadas en los casos reales de Caín. La influencia de estos presentadores/personajes fue tal que autores como Neil Gaiman y Alan Moore los recuperaron para añadirlos a sus obras La Cosa del Pantano –que recordemos que fue creada por Bernie Wrightson para la colección que nos ocupa- y The Sandman.
Este volumen recoge una buena muestra de lo que fue el trabajo de Wrightson para esta serie. Autor que pudiera venir precedido con el apelativo de Maestro del terror, aunque para mi gusto Joan Boix, tratado en este blog le supera en dibujo y guión, pero ya se sabe que lo foráneo es más aceptado por editoriales y lectores.
Pero la afirmación anterior no quita que Bernie Wrightson fuera uno de los mejores autores de género, sus historias son concisas y recurrentes a una temática de monstruos, locura e infierno. La muestra de este primer volumen es imprescindible para conocer al autor, el terror en el cómic y por supuesto para pasárselo de miedo.