50 aniversario de Mortadelo y Filemon
Si hay algún personaje que probablemente haya acompañado a muchos niños españoles durante décadas, ese ha sido Mortadelo. Aún recuerdo aquellos buenos ratos que pasaba, sentado en mi habitación, o en el salón, o tumbado en el suelo, leyendo los tebeos de Mortadelo y su inseparable jefe, Filemón. Y cómo me reía con ellos. ¡ Qué buenos recuerdos que me dejaron ! Era un humor sencillo, fresco, sin buscar segundas intenciones. Sólo reir con el absurdo. Reir por reir. Parece que no hace mucho de cuando los leía, y a principios de año, Mortadelo y Filemón celebran su 50 aniversario.
Nacieron en 1958, un 20 de enero, y con el tiempo, se convirtieron en los personajes de cómic más aplaudidos entre los españoles. Ni aquéllo cómics de Spiderman, La Patrulla X (a la que ahora les ha dado por llamar con su término anglosajón, X-Men), los 4 Fantásticos o Thor, podían en los kioscos con ellos. Simplemente, ellos eran capaces, con cada tebeo, de arrancarnos carcajadas.
Su creador, Francisco Ibáñez ha cumplido 71 años, pero por cómo dibuja, se intuye en él un espíritu de chaval que más de uno quisiera. Una sonrisa picarona capaz de hacer sonreír al más serio. Y un humor envidiable que transmite en cada historieta.
En aquél año de 1958, la Editorial B necesitaba de un personaje que rompiera moldes, y el encargado de buscarlo fue Francisco Ibáñez. No tardó apenas nada en encontrar el personaje perfecto. Eran como un Holmes y un Watson, pero a la española en plan humorístico. Eso sí, sin resolver casi ningún caso, y de desastre en desastre. De hecho, en sus primeros tiempos, sus indumentarias eran claramente anglosajones, pues Mortadelo vestía paraguas y bombín (sí, sí, bombín), y Filemón vestía chaqueta de franela, sombrero y fumaba en pipa.
Pocas viñetas tardaron en encontrarse, y finalmente, fundaron una agencia de información en la que Filemón se convirtió en jefe, pero apenas unas historietas después fueron contratados por la T.I.A. con la que han trabajado durante años. Con el transcurso del tiempo fueron apareciendo otros personajes, más o menos entrañables, pero que hoy día, son inseparables e indispensables en los continuos desastres e investigaciones cutres de Mortadelo y Filemón. Así aparecieron el Super, el profesor Bacterio y la secretaria Ofelia, siempre coladita por Mortadelo.
Pero no todo fue un camino de rosas para estos dos personajes, y es que años atrás, la Editorial Bruguera compró sus derechos y a punto estuvieron de quitarles los personajes a Ibáñez. Finalmente, los tribunales le dieron la razón a Ibáñez, y de nuevo, y hasta ahora, pudo volver a dibujar a sus famosos personajes. ¿Os imagináis qué hubiera sido de Mortadelo y Filemón sin su «padre», Ibáñez? Yo no. No es posible la existencia de unos sin el otro.
Ahora con el 50 aniversario de Mortadelo y Filemón se editará una publicación de homenaje que se titulará «El gran libro de Mortadelo y Filemón«, en el que se recogerán los momentos más especiales y recordados de estos personajes, así como un DVD adicional.
Un merecidísimo homenaje, sin duda alguna, y una joya, para los que como yo, crecimos entre risas con las aventuras de estos dos grandes personajes, Mortadelo y Filemón.
Gracias, Ibáñez. Gracias por estos 50 años de risas.